A lo largo de mi experiencia acompañando artistas, veía que estaba entrando en un mundo tenebroso donde la mafia supera la realidad. Muchos artistas me suplicaron que les podria llegar a llevar porque se fiaban más de mi que de su propio manager o agencia. Yo ya era una persona que compartia eventos ya que hacia sus presentaciones o trabajaba con ellos a los escenarios. Esto fue lo que me propició a crear con una marca llamada Jamboo Agency, una empresa que lleva más que artistas, que englobara todo un servicio 360º.
Lo mejor de todo es hacer tratos 360 en donde se manejen todos los aspectos de un proyecto artístico (booking, prensa, management, editora, publishing, marketing, servicios de representación artística, entre otros). En Jamboo Agency nos hemos especializado en las grandes giras, eventos, artistas y en televisión.
Mi consejo es que es MUY recomendable que el artista empiece gestionando su propio proyecto y encontrando las herramientas para crecer; esto incluye: saber de marketing, encontrar su mercado meta, invertir en su proyecto (publicidad, calidad de grabación, diseño, etc.), y por último: ENSAYAR MUCHÍSIMO. Las agencias casi siempre están buscando artistas que puedan tener un MUY buen show o imagen impecable.
El mánager es quien da la cara por el artista, pero en ningún momento toma las decisiones por él. Le ayuda a tomarlas exponiendo todas las opciones que tenga su carrera sobre la mesa. Como puede intuirse, la relación que se forja entre ambos es de mucha confianza y de compromiso mutuo, se convierte en el principal apoyo del artista en muchas relaciones y, como el normal, en el transcurso del tiempo surgirán problemas y dificultades.
Por ello se hace necesario que las funciones y obligaciones de cada uno, tanto del artista como del mánager, se establezcan por escrito, en contrato, para que ninguno salga perjudicado.
Llegados a mi Web, quería explicar el porque y cuando de todo.